DifuArtePalencia

DifuArtePalencia

Antonio Canova

Antonio Canova

Logotipo de DifuArtePalenciaAntonio Canova, (Possagno, 1/11/ 1757) – (Venecia, 13/10/1822), fue un escultor y pintor neoclásico italiano de procedencia humilde, pero con una sólida educación artística, la cual, le sirvió para despuntar sus dotes a la temprana edad de nueve años desarrollando sus primeras estatuas en mármol y dos pequeños altares-relicarios.

El abuelo estaba apadrinado por la reconocida familia Falier (Venecia) y ésta, a su vez, percibió el talento que Antonio Canova poseía y decidió patrocinarlo.

Además de su educación artística contó con la formación del escultor Giuseppe Torretto que supo captar el potencial artístico de Canova y le recomendó presentarse en la Academia de Bellas Artes de Venecia, de este modo, adquirió formación a la par que trabajaba.

Cuando Canova contaba con la edad de dieciséis años falleció Torretto (1773), permaneciendo solamente con su formación un año más en el taller que posteriormente dirigió el sobrino de Torretto (Giovanni Ferrari).

En sus iniciales obras muestra una inclinación por el arte rococó consiguiendo un primer reconocimiento.

De estos primeros trabajos emergen obras como: Teseo y el Minotauro (1781-1783) y Psique (1793), dejando patente su destreza.

Más tarde, en los viajes que realizó a Roma gesto el estilo clásico, no siendo hasta el año 1831 cuando se afinca definitivamente en Roma y perfila el stile por el cual es reconocido mundialmente.

De este modo, y con el transcurso del tiempo es considerado el mejor escultor de Europa siendo nombrado director de la Academia de San Lucas en Roma, Inspector general de Antigüedades y Bellas Artes de los Estados Pontificios y obteniendo varios premios.

Bien es cierto, que el nombre de Antonio Canova está asociado a la escultura realizada en mármol, pero para poder desarrollar las obras con exactitud contó con unos amplios conocimientos de anatomía y con una destreza peculiar hacia la pintura.

De esta manera, podemos afirmar que las obras escultóricas de Canova destacan por una precisa exactitud de la anatomía humana envuelta en una peculiar aura de frialdad en la que curiosamente consigue perfilar un perfecto acabado mostrando un ideal de la belleza natural en reposo.

Antes de detallar el trabajo escultórico de Canova voy a prestar atención a las pinturas y bocetos que gesto durante su amplia vida artística.

Antonio Canova

La importancia del Dibujo en la formación artística de Antonio Canova

 

Desde sus comienzos el dibujo formo parte esencial en la formación artística de Canova y por este motivo se dedicó a desarrollar con precisión sus trazados con lápiz.

Como mención especial destacar el Autorretrato desarrollado en un cuaderno F3 que para el propio artista significo un momento pleno de intimidad inigualable al trazado de la escultura o al óleo que tiempo después desarrollo.

De este modo, sus dibujos en cuaderno se convierten en una forma de expresar sus ideas y así lo dejo patente en el Cuaderno de Possagno formado por 60 hojas de las cuales se conservan solamente 43.

También figuran en dicho cuaderno representaciones de la danza (Cuatro bailarines), La Figura Femenina Angustiada, todos estos dibujos se pueden visualizar en el Museo Canova en Italia.

A continuación, expongo algunas de sus pinturas.

Retrato de Amadeo Svajer (1790)
Autoretrato de Antonio Canova (1792)
Las tres gracias bailando (1799)

Obras escultóricas más célebres de Antonio Canova

Entre las numerosas obras escultóricas de Canova: (50 bustos, 40 estatuas, Monumentos Funerarios y Modelos en arcilla y yeso) cabe destacar las siguientes:

Eurídice (1776)
Orfeo (1776)
Dédalo e Ícaro (1779)
Teseo y el Minotauro (1781-1783)
Tumba del Papa Clemente XIII (1792)
Eros y Psique, Psique reanimada por el beso del amor (1793)
Hércules y Licas (1796)
Magdalena penitente (1796)
Monumento fúnebre de María Cristina de Austria (1798-1805)
Cupido y Psique (1800)
Napoleón como Marte el pacificador (1806)
Perseo con la cabeza de Medusa (1806)
Letizia Ramolino Bonaparte (1807)
Paolina Borghese como Venus Victrix (1808)
Napoleón I (1811)
Venus y Marte (1815-1819)
París (1816)
Hebe (1817)
Las tres Gracias (1817)
Venus Itálica (1819)
Teseo y el Centauro (1819)
Logotipo de DifuArtePalencia

Ermita de la Piedad-Herrera (Palencia): Segunda parte

Logotipo de DifuArtePalencia

Ermita de la Piedad-Herrera (Palencia):

Segunda Parte

En el anterior post dedicado a la Ermita de la Piedad-Herrera (Palencia) hice una breve referencia a su historia, posibles orígenes, mejoras y adquisiciones que se realizaron a través del tiempo.

Sin embargo, en esta ocasión, me centrare en detallar el valor artístico de sus frescos al óleo de estilo barroco y que ocupan la totalidad de dicha ermita acaparando la atención del visitante.

Como ya indiqué con anterioridad, esta obra artística fue realizada por el pintor Mariano Lantada, (1900-1903), el cual, dejo patente en los paneles rectangulares de las bóvedas los Siete Dolores de la Virgen María.

Pero para poder conocer con más exactitud estos hermosos frescos voy hacer un repaso pictórico de: las tres bóvedas, el camarín y la sacristía:

Las Bóvedas

La Primera Bóveda:

Al entrar en la primera bóveda nos percatamos que en la parte izquierda se encuentra la Presentación del Niño en el Templo, (Primer Dolor) mostrando a la Virgen María en presencia de José y de Ana la profetisa, rodeada de ángeles y unas delicadas azucenas (representando la pureza del corazón).

Como dato especial destacar que todas las bóvedas tienen un semicírculo a modo de rectángulo que contiene escenas bíblicas y en este caso en concreto se presenta a Esther frente al rey Asuero exhibiendo clemencia hacia su pueblo.

Si volteamos la cabeza podemos apreciar a la derecha ¨La Huida a Egipto¨ (Segundo Dolor).

Frente a este fresco observamos la presencia nocturna de la luna que esboza una hermosa luz plateada sobre un lago.

También se avista en el fondo un templo faraónico cubierto de palmeras.

En esta ocasión, la Virgen María aparece a lomos de un borriquillo, mostrándose protectora ante su hijo, mientras que San José les salvaguarda de la huida que han emprendido.

La parte superior revela a Moisés, huyendo de Egipto, representando a Cristo libertador y guía de Dios.

El centro de la bóveda hace alusión a la Apoteosis del Cordero, la moldura que forma el arco muestra un cielo estrellado haciendo presencia ocho ángeles con las Señales de la Pasión de Cristo.

Por otra parte, en los contrafuertes que dividen la bóveda se encuentran María Inmaculada y los profetas: Malaquías y Oseas.

Segunda Bóveda de la Ermita de la Piedad:

Nos posicionamos de nuevo a la izquierda y oteamos el séptimo dolor: Jesús es sepultado.

El tercer dolor: Jesús perdido en el Templo. se encuentra en la zona derecha.

Resalta en los bordes, las ramas con abundantes frutos que simulan subir por la pared, en la parte superior se encuentran la exposición de la divina ciencia: la fe, la esperanza y la caridad.

El semicírculo hace referencia a la expulsión de Adán y Eva del paraíso.

Y en el centro de la bóveda está la Apoteosis de la Cruz sostenida por dos ángeles, asimismo en los extremos localizamos otro par de ángeles, uno de ellos, adentrándose en el Paraíso y el otro nos indica el Misterio de la Santísima Trinidad.

En esta representación tan bíblica no podía faltar en los contrafuertes la figura de María madre de Dios y poseedora de la sabiduría.

Tercera y última Bóveda:

Destaca por ser la más antigua, espaciosa y rectangular de las tres bóvedas.

Nos posicionamos de nuevo en el lado izquierdo superior y vemos la alegoría del Encuentro de María con su hijo, la acompañan los signos: El Arca de la Alianza y las tablas de la Ley

Por otra parte, en la zona inferior aparecen columnas rotas reproduciendo las divinidades derrotadas.

En la zona derecha se traza la Crucifixión del Señor, flanqueado por un centurión que es portador de una lanza que lisia el costado del Cristo.

Como muestra del dolor aparece a los pies de la Cruz : María, Juan y María Magdalena.

En esta ocasión el semicírculo superior está dispuesto por dos escenas:

Por un lado, distinguimos la presencia de Abrahán, acompañado de su hijo Isaac emprendiendo el camino al monte de Moria.

Y por otro, Abigail suplicando al rey David clemencia hacia su esposo (Nabal) y sus posesiones.

Los bordes de los rectángulos se encuentran marcados por los símbolos de la Biblia: el cordero pascual y la serpiente de bronce, en esta ocasión Moisés y el rey David portan un cetro y un arpa.

En la parte opuesta la noche emerge con la imagen de siete crucificados.

La bóveda es de una gran riqueza artística con diversos nervios en un inmenso cielo azul repleto de estrellas, varios son los ángeles que se encuentran adosados a San Miguel, San Rafael y San Gabriel.

La parte más alta del arco tiene un escudo con el anagrama de María.

En una de las divisiones de la pared se encuentra la iconografía de la Virgen María entregando el Rosario a Santo Domingo de Guzmán.

Un poco más abajo se halla el Arca de la Alianza, de esta manera en el lado contrario esta simbolizada la escena del Diluvio.

Camarín de la Ermita de la Piedad

Después de haber visualizado las bóvedas nos adentramos en el Camarín o Capilla Interior, la cual tiene forma de ábside.

Partiendo del centro nos percatamos del Altar, donde se encuentra Nuestra Señora de la Piedad (patrona de la festividad de Herrera de Pisuerga).

 Precisamente aquí, se encuentra el Sexto Dolor formado por la imagen de la Virgen con su hijo fallecido en su regazo, arropado por las más variadas escenas bíblicas y por un séquito de hermosos ángeles.

La cúpula define el misterio de la Asunción de María y su coronación.

De tal modo se muestra a María sentada en un celestial trono de nubes y elevada por varios ángeles, mientras que el Espíritu Santo en forma de paloma emite sus rayos a lo largo de toda la representación.

Por lo que se refiere a bóveda podemos destacar las treinta y tres figuras bíblicas que acaparan toda la superficie.

Y como broche final en la parte inferior hay entre las nubes, una orla con cintas, inscripciones y guirnaldas.

Pinturas de la Sacristía

En la Sacristía resaltan la variedad de cuadros de diversos tamaños y dos de gran envergadura.

Uno de ellos es autoría de Bayergo Faciebat y el restante muestra la figura de la Inmaculada, los de menor tamaño llevan el porte de los Santos:

Jerónimo y Antonio de Padua

Y de las Santas:

Justa y Rufina-.       

La Ermita de la Piedad en Herrera de Pisuerga (Palencia) ha evolucionado artísticamente hasta mostrar en la actualidad un patrimonio digno de admiración.

Logotipo de DifuArtePalencia

Ermita de la Piedad Herrera (Palencia): Primera parte

Logotipo de DifuArtePalencia

Ermita de la PiedadHerrera (Palencia):

Primera parte

La Ermita de la Piedad se encuentra situada en Herrera de Pisuerga-Palencia (España), es conocida con el meritorio nombre de ¨La Capilla Sixtina castellana¨, titulo concedido por el colorido tan variopinto de sus frescos trazados al óleo.

Antes de adentrarnos en la descripción de dichos oleos (próximo post) voy a establecer un breve repaso histórico

Para poder establecer un recorrido histórico nos tenemos que trasladar a épocas arcaicas en las que las comarcas de:

Herrera de Pisuerga.

Ventosa.

Nestar.

Barrialba.

 Y Villaneceriel formaban parte de las ordenes que dependían de la reina.

A pesar de que se carecen de datos precisos, si se puede detallar con cierta exactitud que los promotores de esta maravillosa ermita fueron la familia Fernández de Velasco.

En concreto D. Pedro Fernández de Velasco el cual poseía un acreditado prestigio y una fuerte vinculación religiosa.

Sus creencias religiosas fueron la base para establecer la devoción de Nuestra Señora de la Piedad y posteriormente de su ermita.

Para su edificación se traslada a las afueras de la villa, que hoy, es un anexo de la propia población de Herrera de Pisuerga, es decir, al pie de la carretera que fluye entre Palencia-Santander.

El punto exacto de ubicación se encuentra adosado a la que en sus días fue el templo de Santa María, es ahí, donde construye una pequeña ermita con la imagen de dicha Santa.

Esta pequeña ermita en un principio constaba de una sola bóveda gótica y era la más cercana al camarín.

También se construyen en Herrera de Pisuerga otro tipo de edificaciones religiosas la (Parroquia de Santa Ana).

No obstante, la población mostró un especial interés hacia la pequeña ermita dejando de lado y en ruinas el templo de Santa María.

De este modo se volcaron paulatinamente en reformar y mejorar la Ermita de la Piedad. 

REPASO HISTORICO EN TORNO A LA

ERMITA DE LA PIEDAD

Esta espectacular ermita que fue construida en el siglo XVIII ha sido testigo a lo largo del tiempo de las siguientes mejoras y adquisiciones:

     Se transformo el camarín y dos bóvedas en el año 1751

 Durante el transcurso del año 1727 se construyó el coro, la casa y sus dependencias.

Debido a la destrucción de las vidrieras durante la ocupación de los franceses, se construye unas nuevas en el año 1815.

Los cuadros de los altares fueron restaurados en torno al año 1823.

Se aportaron tres bancos de noble madera en el año 1826.

Durante el año 1832 se compra un manto de terciopelo.

En 1846 se obtiene un nuevo manto para la Virgen, siendo los devotos los que aportaron el dinero necesario para la adquisición.

Se concluye en 1863 en realizar la comprar de las ropas de la liturgia, dichas ropas fueron confeccionadas por D. Mariano García e Hijos.

En la actualidad se conservan el terno-casulla, las dalmáticas y la capa de tisú y bordado.

Y también se conservan el frontal para el altar y unas credencias que fueron confeccionadas en dicho año.

El año 1878 fue portador de las obras de saneamiento del portal, realizada por el maestro albañil Gervasio Francés.

1879 fue el año de realizar nuevas adquisiciones, en concreto, seis maravillosos candelabros plateados, dos sacras y un atril.

 Nuevamente en 1880 se procede a realizar un saneamiento al camarín, ya que había presentado ciertas humedades, en esta fecha también se modifica la sacristía y la verja.

Un nuevo cálido manto de raso y seda cubría a la Virgen en el año 1881.

Durante el transcurso del año 1882 se construye una nueva reja del presbiterio, realizada por el herrero Nazario Ruiz, la pintura y la decoración corrió a cargo de Gregorio Herrero.

Un año después en 1883 se construye el entarimado y los zócalos de la sacristía, en esta fecha consta como párroco de la ermita D. Tomás Martínez.

Resalta el zócalo de madera de nogal y roble, al cual se le aplico una capa antihumedad para evitar su deterioro, de esta obra se encargó Daniel Abad.

Entre los años 1900-1903 la Ermita de la Piedad experimenta su transformación más importante, aportando el pintor Mariano Lantada su trabajo artístico, también se procede a retejar la ermita y sus dependencias.

Las verjas actuales que cierran la entrada se construyeron en el año 1950.

A consecuencia de las nuevas apariciones de humedades se llevo a cabo una vez más un saneamiento (1966).

 Y finalmente en el año 2010 el pintor palentino Antonio Capel realizó unas reformas en el Camarín.

Estas reformas y adquisiciones darán paso a la actual Ermita de la Piedad mostrando unos frescos al óleo de un enriquecedor valor artístico y que detallaré con más precisión en el siguiente post.

Logotipo de DifuArtePalencia
error: Contenido Protegido !!